
Síntesis:
Harriet y David son conocidos por ser conservadores: ambos se han prometido mantenerse vírgenes hasta que se casen con el indicado. Cuando se ven, saben que son iguales, y descubren que ambos desean una familia grande: muchos hijos felices en una casa grande, perfecta. Se casan y se vuelven la familia admirada por muchos, separadas de la ciudad en su gran casa y luchando contra los que los consideran anticuados.
"¡Locos, irresponsables!" "¡Ya no tengan más hijos!" les dicen todos, pero pese a toda la insolidaridad, ellos están convencidos de que su amor es capaz de todo. El quinto hijo, sin embargo, empieza a crear problemas incluso antes de haber nacido. El feto se revuelve en el vientre de Harriet. Una fuerza excepcional que le viene del niño que crece en su vientre, la hace correr sin descanso, la agobia, vive asustada y está deseando "desprenderse de él". Ella es la primera en cambiar: su actitud contra todos, con los dolores de la espera, agobian a la familia y la fragmentan. Y cuando el niño nace un mes antes, las cosas no mejoran para nada.
Con un volumen y fuerza excepcionales, el niño Ben, con su fuerza y malas intenciones, ahuyenta a todos, es rechazado por el padre y sobreprotegido por la madre, quien cree que aun hay redencion para su hijo. ¿Puede existir alguien tan malo? ¿Es Ben una mutación, una regresión genética que lo sitúa entre grupos surgidos de no se sabe bien dónde?
La esperanza es peligrosa, y el relato abarca la posibilidad de que existan seres humanos deshumanizados desde nacimiento. Porque Ben, si bien se mira, no es especialmente deforme, ni comete actos graves... Pero lo terrible es que Ben podría ser el hijo de cualquiera...
Puntos en Contra
Las escenas violentas no son tales: este relato es exquisitamente ilustrado como la tensióna anormal de una familia anormalmente feliz de los suburbios. Desde el principio hasta el final, es un reto para quienes siempre quieren acción en lo que leen. El final puede parecer decepcionante si no se siguió el hilo de la evolución de los personajes, pues es un relato para asustarnos con los cambios mentales de todos los personajes, pero las escenas de acción y crudeza están muy limitadas.
Puntos a Favor
Su ambiente, con su gran tensión psicológica, es excelente para quién, más que gustar del horror con sangre, disfruta el suspenso y los thrillers psicológicos. El libro trata el tema del "niño maldito", "el niño indeseado", con una calma imperativa, siempre presente hasta el final. Es una delicia leer las impactantes descripciones de Ben: están tan bien hechas que tu imaginación puede casi palpar a ese niño extraño y salvaje.
La Mejor Escena
En una de las pocas escenas tipo gore, David convence a Harriet de mandar a Ben a un "centro especial". Pero Harriet se arrepiente y va a "salvar a su bebé". Llega a un desolado edificio urbano, y entra sin autorización, recorriendo los silenciosos y pestilentes pasillos. Lo que encontrará al abrir la puerta equivocada quedará grabado en su mente para siempre, ¡y te dará un susto de muerte!
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Fanny Esquivel
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